Actualización en el tratamiento del tabaquismo

Empezar un nuevo año casi siempre implica modificaciones en cuanto a la financiación algunos medicamentos por parte de la Seguridad Social. Esta vez entre otras, ha sido en el ámbito del tabaquismo, enfermedad que a día de hoy todavía es causa de morbilidad y mortalidad en gran parte de la población, y lejos de ir en descenso, ha tenido un preocupante aumento entre los más jóvenes. Y es que desde el 1 de enero han pasado a financiarse dos medicamentos que se utilizan para la deshabituación tabáquica, vareniclina y bupropion, ambos vía oral.

Esto ha sido una gran noticia para los que seguimos luchando contra esta enfermedad que tantas dificultades conlleva debido en gran parte, al poder que ejerce esta industria. Sin embargo, muchas personas no se han alegrado tanto de esta noticia ya que piensan que estos recursos se podrían haber utilizado en otros pacientes con otras patologías graves, y los fumadores lo hacen por decisión propia y tienen opción de dejarlo siempre que quieran.

En cierta medida entendemos esta opinión, pero en realidad no es están sencillo puesto que en el proceso de deshabituación hay muchas variables en juego. Tenemos que entender que la sanidad pública estudia estas decisiones desde el impacto económico que puede ocasionar. Los fumadores hacen una mayor utilización de los servicios sanitarios y tienen unas mayores tasas de absentismo laboral; en costes sanitarios,un fumador le cuesta el doble al sistema público que un no fumador. Una disminución de fumadores significaría por tanto, menos costes para este sistema.

¿Qué requisitos tendrá esta financiación?
Obviamente no todos los fumadores están dispuestos a dejar de fumar, por ello, los recursos irán destinados solo a aquellos que realmente lo deseen. Estas son las condiciones que se han de cumplir:

  • Pacientes que fumen 10 cigarrillos o más al día y tengan además un alto nivel de dependencia calificado por el test de Fagerström ≥ 7.
  • Pacientes que tengan una motivación expresa de dejar de fumar (al menos un intento previo en el último año).
  • Pacientes deben estén incluidos en programas de apoyo de deshabituación tabáquica (individual o grupal).
  • Solo se financiará un intento anual por paciente.

Independientemente de los tratamientos farmacológicos, nosotros siempre estamos a favor del abordaje desde un punto de vista multidisciplinar puesto que el tabaquismo no es solo un problema físico, sino también psicológico y conductual.

Como siempre decimos, nunca es tarde para empezar. Si te estas planteando dejar de fumar, ya has dado un gran paso!

No dudes en preguntarnos, tu salud no dejará de agradecértelo.